Mientras nace el hermanito de autosuficiencia les dejamos un cuentito mixteco del libro de Alejandra Cruz Ortiz, si quieres conocer la página del CIESAS puedes acceder aquí: http://occidente.ciesas.edu.mx/. Este cuentito queda muy de modo a las primeras lluvias :) ¡Gracias pajarito!
El pajarito que pide agua a dios
Cuentan los ancianos que en la selva hay un pajarito que pide agua a dios cuando hay sequía, se posa en el árbol más alto y grande.
Este pajarito le habla a dios con mucho respeto y humildad, pero primero le pide permiso para poder mirar el cielo, la casa de dios.
-Con respeto, padre mío, le pido permiso para alzar la vista ante usted porque tengo mucha necesidad de pedirle un favor. Ahorita ya no tenemos agua y la quiero no para mí solamente, sino para todos los que viven en el pueblo, por eso le ruego que me escuche, padre mío. Hace mucho que se están secando nuestros ríos y manantiales, estamos sufriendo de escasez de agua porque los ríos ya tienen un hilito de agua. Si usted no nos manda agua no tendríamos alimento tanto para el pueblo como para nosotros, nos moriremos de hambre y sed- dijo el pajarito.
Dios se asomó desde el cielo para ver quién lo estaba llamando, esa un pajarito y dios le dijo:
-Ahora estás pidiendo agua, pero ustedes cuando se bañan en los lagos con sus alas riegan un montón de agua, no la cuidan.
Y el pajarito le dijo a dios: -Señor padre mío, usted perdone por lo que hacemos; ya no vamos a desperdiciar el agua. Cuando veamos que ya empieza a faltar el agua nos vamos a bañar con tierrita y arenita, cuando ya nos mande de nuevo el agua nos bañaremos entonces otra vez con agua, pero cuidando que no se desperdicie.
Dios le dijo:-Voy a pensar para ver si saco dos de mis ollas de nubes, para que tengan agua en tu pueblo.
Y el pajarito bajó del árbol y encontró a varios cocodrilos en la sombra del gran árbol.
-Pajarito ¿qué cantabas? Porque tu canción era muy triste- dijo un cocodrilo.
-Cómo no voy a estar triste, si dios me regañó por no cuidar el agua y a ti también te voy a regañar porque debes cuidar el agua. Dios me dijo que iba a pensar si vaciaba sus dos ollas de nubes para que llueva en el pueblo- dijo el pajarito con voz fuerte-. Estoy muy triste porque en los ríos hay un pequeño hilo de agua y estoy pensando que ustedes toman mucho agua y salpican mucho cuando se bañan- le dijo al cocodrilo.
-Mira- dijo el cocodrilo, no te enojes; vamos a cuidar el agua, nos vamos a bañar poco para no desperdiciarla porque yo no puedo pedírsela a dios. No puedo subir a los árboles, estoy muy chaparro y gordo. Por eso te pido por favor que le digas que yo también voy a cuidar el agua y que saque sus ollas de nubes y, si puedo, ayudaré en algo para poder ahorrar agua.
Y le pregunto al pajarito: -¿Cómo vas a ahorrar el agua?
El cocodrilo respondió: -Tengo una idea, vamos a escarbar un hoyo ancho y profundo y allí guardaremos mucho agua. Y le dices a dios que en esa agua que vamos a ahorrar ponga algunos peces para que yo coma y también los humanos. Tú que cantas tan hermoso y también bailas muy bonito, canta ante dios, porque estoy seguro que le va a gustar y se le va a ablandar y nos va echar agüita para nuestro pueblo. Pero cántale una canción a su oído, esa canción que es muy triste para conmoverlo.
El pajarito le dijo al cocodrilo: -Tú quieres que dios nos regañe.
-¡Pero si te regaña nada pierdes, qué tal si nos manda de inmediato el agua!- dijo el cocodrilo
El pajarito escogió una montaña alta y ahí estaba un gran árbol; como pensaba que dios lo iba a regañar bajó la mirada y empezó a pedirle que le diera permiso para dirigirse a él y poder alzar la vista hacia el cielo. Le dijo:
-Padre grande, quiero alzar mi vista para poder verlo.
Y dios le dijo: -Vete, vete, al rato o saco las dos ollas de nubes que te dije para vaciarte el agua, pero tienes que escucharme muy bien las palabras que salen de mi boca. Ustedes tienen que cuidarla.
El pajarito le dijo: -Sí señor, la vamos a cuidar. Con su permiso le voy a cantar y bailar una canción. Además traigo un mensaje del cocodrilo: que puede ayudar a escarbar un gran pozo para guardar el agua.
-¡Y cómo la van a guardar! Se va a salir el agua.
El pajarito le dijo que el cocodrilo iba a echar su baba y va a brincar hasta que quede dura y no se salga el agua. Dios le pidió que escarbaran primero el pozo, y cuando lo terminaran le avisaran para que lo pudiera revisar. Se le avisó al cocodrilo y de inmediato comenzaron a escarbar el pozo. Al terminarlo le dijeron al pajarito que ya estaba listo, que le avisara a dios para que mandara el agua para que ellos la pudieran guardar... Continuará...
Muchas gracias a erikita la transcriptora estrella y al fraternuro, que financió la compra del librito.
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